Después de un miércoles muy tenso, se acordó una tregua de 25 días en el conflicto por los despidos en Catriel. El Sindicato de Camioneros de Río Negro reclama hace tiempo la reincorporación de un grupo de choferes que fueron echados de la empresa Correa. Quedaron en la calle sin recibir salarios ni indemnizaciones. Durante un mes se intentó resolver el problema pero la paciencia de los compañeros se agotó. El martes al mediodía iniciaron medidas de fuerza en la rotonda de ingreso a la ciudad. El paro afectó la producción local y tensó la relación con los empresarios. Finalmente, ayer por la tarde hubo una importante reunión que marcó el camino hacia un acuerdo.

La firmeza de la lucha sindical de Camioneros Río Negro se expresó durante horas de protesta en Catriel. Los afiliados pasaron día y noche en el acceso a la ciudad, manifestándose en contra de la ola de despidos en el sector petrolero. La tensión fue en aumento y ayer a la mañana un grupo decidió prender fuego un camión de la empresa CGT. Las postales del fuego llamaron la atención de las autoridades, que rápidamente convocaron a una cita en la Secretaría de Trabajo de Cipolletti. Los dirigentes de Camioneros Río Negro buscaron bajar la presión y asistieron al encuentro con los responsables de la empresa, el Secretario de Energía – Sebastián Caldiero – y representantes de la cartera laboral.

La charla se extendió por varias horas en la delegación cipoleña. Rubén Belich defendió los intereses de los trabajadores desempleados y apeló a la mediación de las autoridades. La discusión no fue fácil pero Vista accedió a pagar los salarios adeudados. Hoy jueves se depositará el dinero, un alivio para los compañeros que perdieron su puesto laboral. Camioneros Río Negro adelantó que seguirá peleando por una posible reubicación de los choferes y demandará que se cumpla con todo lo que marca la ley.  “Algo encontramos, el sueldo de los despedidos. Nos queda negociar las indemnizaciones finales de los 35 compañeros. Tenemos ahora 25 días para negociar”, afirmó Belich en AM 740. “Hay esperanzas, había mucha desesperación. Esto es una ayuda, vamos a seguir conversando. Nos jugamos a todo o nada porque la bronca era tremenda”, señaló el dirigente.

Los compañeros están, confían en nosotros. Saben que nunca les hemos fallado“, dijo Belich en agradecimiento hacia los afiliados que sostuvieron la protesta. Por momentos, la situación fue tensa y el incendio de la unidad de GTC fue repudiado por los referentes del gobierno provincial. “Entendemos la angustia pero hubo episodios que nos hicieron noticia a nivel nacional”, cuestionó Caldiero en AM 740. “Recibimos con agrado a cualquier empresa seria. Pero esa toma de decisiones, esa nueva metodología de trabajo, debe tener el acuerdo de los gremios por la paz social. Hubo errores de la empresa”, agregó. “Hoy cumplimos una doble función como provincia por lo laboral y por la afectación en los yacimientos. Intervenimos para intentar conciliar. Tenemos un principio de acuerdo para destrabar el conflicto”, confirmó el funcionario.